ALIMENTOS QUE SE PARECEN A PARTES DEL CUERPO

[ANTONIO GARAU]

¿FUNCIONAN?

     Casi se podría decir que son una especie de "micro-micro cosmos" del o en el cuerpo humano.

     Una de las cosas que me alegran más por Navidad, son las nueces californianas. Procuro tenerlas siempre en casa, primero porque me gustan y segundo porque son muy buenas para las enfermedades cardiovasculares.

     Pensando sobre ello, hace un par de días que por mi cabeza rondaba la semejanza de ellas con los bronquios o con el cerebro y, de hecho, al igual que lo haría un detective me puse a buscar por Internet, que había al respecto. La búsqueda fue fructífera.

                                                                                                                           

Desde la Antigüedad las personas utilizaban alimentos con parecidos razonables a partes del cuerpo con la creencia de que podían ayudar a prevenir y curar problemas por similitud. Por ejemplo, la nuez, si la miras, es realmente parecida a un cerebro humano, y curiosamente, su contenido en vitaminas, minerales y ácidos grasos omega 3 y 6 la hacen un alimento muy nutritivo para la salud cerebral.

                                                                                                                  He descubierto, que en un supermercado tienen yogur griego con jengibre y limón.  Ya no faltarán nunca en casa, porque son inigualables.

Moraleja: "No te acostarás sin saber una cosa más."   

Entre los gatos y los frutos secos quizás llegaremos a los 100 años...

Yo he llegado a los 80, lo cual ya es una proeza, teniendo en cuenta lo gastada que está la máquina.

¡A comer frutos secos y yogur griego!