Para los incas los planetas eran deidades que recibían culto, de manera semejante a los antiguos griegos y mesopotamios, para quienes los cuerpos celestes también eran deidades que recibían culto.
Al planeta Júpiter los incas lo conocen con el nombre de Pirua y le sacrificaban personas en sus primeras cosechas. De Pirua viene el Peru. Al planeta Marte lo nombran como Aucayoc y al igual que nuestro Marte, se encarga de los combatientes y de la guerra. Mercurio se llama Catuilla y es el responsable de los mercaderes, caminantes y mensajeros. Saturno es Huacha es el que trae las pestes mortandades y hambres. -Me llamó mucho la atención que una cultura autóctona y sin conexión alguna con la cultura europea haya desarrollado una visión astrológica tan semejante a la nuestra.
El Imperio incaico, que se extiende desde el Ecuador hasta el norte de Chile y el noroeste de Argentina, son personas que se interesan por los astros y sus ciclos, los cuales desempeñan un gran papel en su religión. Tengo la impresión de que la cordillera Andina es como la columna vertebral de un pueblo, de unas gentes, de una cultura que estaba instalada en las tierras altas. Se sabe con seguridad que estos pueblos se interesan por la duración del año solar, del mes lunar sinódico y del ciclo de Venus a quién ofrecen sacrificios de mujeres en cada orto heliaco de Venus, cuando el planeta Venus se dejaba ver el primer dia por el horizonte, antes de salir el Sol ó después de ponerse, igual que hacen los Mayas.
Me contaba Alfredo, un investigador en temas incas, que pudo ver un dibujo con un sacerdote astrónomo indígena, en cuclillas, en su templo, con el ojo aplicado a una muesca o hendidura fija, y observando el punto preciso en que Venus aparece por el horizonte. Estos sacerdotes sentían la necesidad de sincronizar los sacrificios rituales y los ortos y los ocasos de los astros, algo parecido a lo que ocurria en la vieja Europa antes del cristanismo.
Para adaptarse a las leyes del Cosmos y seguir sus ritmos con sus crisis y sus cambios, los antiguos solucionaron el problema de adaptación mediante los sacrificios, ayunos, oraciones y descanso en los puntos de crisis, organizando celebraciones siguiendo los ritmos de la naturaleza, por eso los sacrificios rituales se realizan al orto y al ocaso, o en los cuartos lunares, o en los solsticios y Equinoccios que son los momentos de crisis o cambio.
Estos sacerdotes astrónomos americanos tenían gran preocupación de que los sacrificios fueran realizados en el momento oportuno, lo que ha hecho que su calendario sea de los más precisos, pues temen que en caso contrario podrían destruir el mundo.
Para apoyar esta tesis, en la que se sacrifican personas para aplacar los movimientos sísmicos o las erupciones volcánicas,tenemos dos casos conocidos de sacrificios humanos que lo avalan, el caso del cerro del Plomo y las momias de Salta, en la Provincia de Tucuman, cerca del Aconquija, dos casos idénticos de sacrificios de vírgenes en las laderas de dos volcanes.
Demetrio santos dice con los sacrificios “...Dado que el animal sacrificado debe tener alguna conexión con el dios o el influjo correspondiente a la crisis, entre los fenicios se sacrificaban niños a la Luna, puesto que éstos tienen influencia en la fase infantil...”
-Puedo imaginarme un mundo donde no faltan las erupciones volcánicas y grandes temblores de tierra, que son más frecuentes después de un eclipse o en determinados momentos astronómicos. La Cordillera andina es una zona sísmica de máxima intensidad.
Se sacrifican personas para aplacar los movimientos sísmicos o las erupciones volcánicas y siempre se sacrifica a mujeres vírgenes en las laderas de los volcanes.
En Elche, provincia de Alicante, en la Comunidad Valenciana, de España, en el tiempo de los romanos, en el poblado ibérico que se conoce como la Alcudia, hay ruinas romanas perfectamente conservadas. En este lugar de Europa también se sacrificaban niños a la Diosa. En todas las casa antiguas, a la entrada, a la izquierda hay una hornacina que contiene el cráneo trepanado, con un agujero en el cráneo, del primer hijo que se sacrifica a la Diosa.
“.......Si el Sol que gobierna los niños y los enfermos cardíacos, y sufrimos un punto crítico solar que ha de producir la muerte a cardiacos y a niños, sacrificando a éstos últimos de antemano se deberá evitar la muerte de los cardíacos, según la doctrina de los sacrificios. Igual reza para animales sacrificados en lugar de hombres.....”
Los antiguos griegos llegaron a la máxima expresión de los sacrificios con las hecatombes, donde se sacrificaban cien o más bueyes en una sola celebración. Vestigios de estos antiguos sacrificios rituales se mantienen en España a través de las corridas de Toros, donde aún se mantienen las hecatombes en las fiestas de San Isidro, de San Fermín o de San Juan y se sacrifican cientos de reses bravas, símbolo de Júpiter, regente de España.
Indudablemente los incas practicaban una religión donde los sacrificios formaban parte del ceremonial más importante, al igual que nosotros necesitamos el vino y el incienso, ellos necesitaban mujeres virgenes para sacrificar en momentos astronómicos precisos y en lugares adecuados, como es en la Ciudacita del Aconquija, una fortaleza-templo-observatorio ubicado en el mejor lugar para observar el cielo estrellado, aunque este observatorio celeste tiene una especial función religiosa y militar.
CIUDACITA, SANTUARIO DE ALTURA Y OBSERVATORIO ASTRONÓMICO MÁS ALTO DEL MUNDO.
Los observatorios astronómicos antiguos están ubicados en los mejores lugares para observar el cielo estrellado. Pero tanto en América como en el resto del mundo, estos observatorios celestes tenían una función religiosa.
Uno de los santuarios de altura más conocido de la vieja Europa es el castillo templo de Montsegur, un centro telúrico de primera magnitud, un lugar central desde donde irradia un tipo especial de energía, un templo mágico, una fortaleza espiritual en el mundo material que a su vez es un reloj calendario de piedra..
Montsegur es un ejemplo de santuario de altura situado sobre un enorme pog de roca calcárea en medio del paisaje prepirenaico, destacando entre las cumbres doradas de pitita que dan nombre a los Pirineos.
Pero es en América del sur donde este tipo de construcciones tiene su máximo exponente y en Argentina se sabe de la existencia de 76 sitios arqueológicos de altura según datos aportados por el Centro de Investigaciones Arqueológicas de Alta Montaña de San Juan y el Centro para la Conservación del Patrimonio de Alta Montaña de Salta.
La pregunta más inmediata es ¿para qué servían estas construcciones de altura? Por lo que he leído en los textos de autores modernos, no se aclaran mucho y llegan a decir cosas absurdas como que eran sitios para hacer fuego y señales de humo, por que han hallado restos de carbón vegetal en esos lugares.
Lo más cercano a la realidad es lo que nos cuenta Fray Bernardino Sahagún de las costumbres de los indios americanos a principios del siglo XVI
Al igual que ocurre en las culturas indoeuropeas, estas gentes tenían asociada la astronomía a la religión. Los dioses están en el cielo y reciben culto aquí en la tierra. El culto a estos dioses es lo más sorprendente del todo, pues está íntimamente relacionado con los horribles sacrificios humanos que practicaban estas gentes en su culto religioso.
Contaba fray Sahagún que había estado con los indios mexicas, que en las calendas del primer mes del año, que comienza el 2 de febrero, los indígenas, hacen una gran fiesta en honor a los dioses del agua o de la lluvia, que le llaman Tlaloque; para esta fiesta buscan muchos niños de teta, se los compran a las madres; escogen a aquellos que tienen dos remolinos en la cabeza y que hubiesen nacido en buen signo; dicen que estos eran niños son más agradables a los dioses y los sacrificaban para que diesen agua en su tiempo. A estos niños los llevaban a matar a los montes altos, donde ellos tenían voto de ofrecer; les sacaban los corazones en aquellos montes. Gran cantidad de niños mataban cada año en estos lugares y después de muertos los cocían y luego se los comían.
Sahagún contaba que llevaban a los niños a matar subiendo a los lugares altos en una especie de romería, los llevaban en andas, los adornaban con plumas, flores, piedras preciosas y les ponían alas de papel para que parecieran angelitos, les pintaban la cara colorada con un circulo blanco en las mejillas, les tocaban músicas de flautas y trompetas. Por donde pasa la comitiva, toda la gente lloraba y cuando más lloraba la gente, mejor, porque eso significa que llovería más.
Los sacrificios humanos se practicaban mensualmente. Sahagún nos hablaba de otra diosa; la diosa Chicome coatl, comparable a la diosa Ceres; la diosa llamada la madre de los dioses, corazón de Tiacapan la tierra y nuestra abuela, la diosa de las plantas y de las medicinas y de los cirujanos y los sangradores, las parteras y de todo tipo de adivinos. Esta es la diosa que mayores atributos tiene, la llamaban Tetlacuicuiliaue. Todos los años tenia su fiesta particular y los que le ofrendaban compraban una mujer, la componían con todos los ornamentos propios de la diosa y durante la celebración le regalaban mucho y la halagaban, para que no se entristeciera ni llorase y le daban de comer delicadamente y le rogaban que comiese como gran señora y durante los días de la fiesta hacían delante de ella alardes guerreros y se peleaban delante de ella para darle placer y regocijo.
Llegada la hora, cuando tenía que morir, después de matarla con otras dos mujeres jóvenes que le acompañaban, la desollaban y un hombre o satrapa se vestía con su pellejo y la llevaba vestida por todo el pueblo y hacía de esta manera muchas vanidades, tal como contaba Sahagún, aunque a mí me cuesta imaginar que tipo de barbaridades puede hacer un hombre cubierto con la piel de una mujer recién desollada paseándose por todo el poblado.
Los sacrificios rituales de los incas son menos escandalosos que los de los mexicas y no despellejan a sus víctimas, sólo les extraen el corazón, la descuatizaban y cuecen su carme que luego se comen. Los santuarios de altura como la Ciudacita son lugares destinados a este tipo de culto religioso en los que se realizaban sacrificios humanos.
......’’’’’’’’’’’’’’’’’’
¡Necesitas ser un miembro de Astrologos del Mundo para añadir comentarios!
Participar en Astrologos del Mundo