Quirón en el segundo cuadrante

[Jesús Gabriel Gutiérrez]

Quirón en el 2º cuadrante

 

El factor de descontento está aquí en un sentimiento de incapacidad para reclamar la atención que uno cree que merece según el talento que uno supone que tiene. La persona, viendo que no recibe lo que no se atreve a reclamar directamente, acaba proyectando sobre escenarios sociales –por ejemplo, en el ámbito de la carrera profesional o en la acción grupal- lo que sólo en la intimidad podrá obtener. El caso es que la autoexigencia va en aumento en paralelo al descontento.

Cuando esta atención no es conseguida, la persona es tentada a atribuir al funcionamiento de la sociedad la razón de su malestar. En realidad, el asunto empieza a entrar en la vía de solución cuando la persona dedica su energía al disfrute de lo que le gusta hacer y siendo consciente de no aspirar a ser otro que no él mismo. La persona deja de buscar la caricia social y empieza a centrarse más en lo que la hace sentirse bien consigo mismo sin ninguna otra connotación que el disfrute.

 

Estas personas tienen una capacidad natural para ayudar a acrecentar la creatividad y el goce natural en los demás. Tienen una visión fina de cómo las personas subordinan y traicionan su valía al permitir que opiniones acerca de la sociedad condicionen su capacidad para gozar de lo que hacen.