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Comentario por ROSARIO VELASCO LEONARDO el noviembre 3, 2013 a las 7:14am

Somos el sueño del Vacio, eterno e infinito........

Gracias por el video.

Comentario por Gabrielle Karawek el octubre 27, 2013 a las 1:14pm

Muy agradecido con sus respuestas, Maria Ysabél, Antonio Garau y Enice Rondón. Ciertamente comprender nuestra naturaleza (EL TODO) es una hazaña prácticamente imposible para nuestros esquemas mentales. Puedo decir que concuerdo con sus argumentos, no por lo que entiendo literalmente, sino por lo que genera en mi sentir. Por otro lado, ya que nos gusta y manejamos el lenguaje astrológico, veo lo siguiente (pueden aportar o corregirme si me equivoco):

Como un todo, el universo nos presenta diversos tipos de energía que en suma es aquélla que identificamos como Amor. El Amor no es más que el sentimiento hecho consciencia de que todos somos parte de un mismo ser, por ende, nos identicamos, nos consideramos, nos involucrarnos y podemos apreciarnos entre todos. Ahora bien, ¿cómo podemos llevarlo al lenguaje astrológico? He observado que cada planeta en nuestra sistema (incluyendo a nuestra Tierra, o Gea, como le adjudican algunos) contiene la expresión (o regencia, si lo prefieren) de cada uno de los doce signos del zodiaco.¿Cómo nos vinculamos con este fenómeno a partir de la lectura astrológica? ¿Cómo nos involucramos con otros planetas que desconocemos en el universo, estrellas, satélites y sistemas estelares? Siendo así, ¿por qué no tomarlos en cuenta desde lo hipotético a lo conocido en nuestra experiencia? La respuesta es sencilla, principalmente estamos tratando con señales que nos indican cómo puede manifestarse La energía con diversas formas de ser, y segundo, tomar en cuenta los billones de billones de cuerpos celestes sería una locura para nuestra entendimiento. No obstante, si vamos a estudiar el vínculo que cada individuo, o evento, tiene con el universo, es menester enfocarnos en las energías (mediante los cuerpos celestes), que en síntesis, nos vincula directamente a partir de nuestro planeta. Siguiendo la idea que comparten conmigo, veo que el universo se duplica y multiplica, de modo que las doce esencias (por dar un número simbólico) que nos vincula, se encuentran en cada lugar del universo de acuerdo al orden o consciencia que se establece. Si la energía es eterna, como sabemos, entonces estas manifestaciones que presenciamos, y bien leemos en astrología, no dejan de SER en cada plano que la vivamos. P.e, La idea de conexión con todo, como un todo, me recuerda a Neptuno, mientras que la idea de comparar, diversificar y discernir para llegar al entendimiento es Mercurio (vemos ambas energías, y otras más, manifestarse en este foro). ¿Qué opinan al respecto?

Saludos cordiales.

Comentario por Maria Ysabél el octubre 27, 2013 a las 12:24pm

     ¡Hola Gabrielle! El punto concreto que tu denominas "quien realmente comprenda la verdad revelada", parte fundamentalmente, de no confundir religión con espiritualidad y desde luego, de la capacidad de aceptación, entendimiento y conocimiento de un@ mism@, que es lo que posibilita todo el resto de "entendimientos-conocimientos", tanto de los demás, como del mundo que nos rodea. 

       Es en nuestra consciencia, donde Dios se piensa a sí mismo. Tu "¿dónde quedo yo como conciencia individual?" está respondido hace miles de años: "Yo, Soy quien Yo Soy". "Yo Soy el que Soy". Yo Soy Yo. Todas son frases de los grandes Maestros de la Humanidad, en muchos su frase definitiva. 

       Por otra parte, esta es la pregunta fundamental que todos los adeptos nos hacemos continuamente: ¿Quien Soy Yo? ¿Soy la imagen que se refleja si me miro en un espejo? ¿Soy el espejo? ... Si desaparece mi imagen del espejo ¿dejo de existir? ¿Deja de existir el espejo? ¿Soy la imagen que me devuelven los demás de mi? Si no hay nadie y estoy sólo, ¿quién soy? Esta es una hermosa pregunta. 

       Como dice el Kybalion (no sé si considerarás la filosofía hermética del antiguo egipto, como algo religioso o moral...."): "Todas las cosas están en el TODO" y es igualmente cierto que "el TODO, está en todas las cosas". Toda la virtud, vida, espíritu o realidad de la imagen mental -y recuerda que el universo es mental-, se deriva de la "inmanente mente" del pensador. Esto me recuerda los últimos experimentos-hallazgos de los físicos cuánticos con respecto a las substanciosas diferencias existentes en un experimento, haya, o no haya un observador presente. 

       Quiero decir Gabrielle, que si te mueres y crees en Jesucristo, tienes muchas probabilidades de dar con la energía crística, por el contrario, si eres ateo, o musulmán, esto sería algo extraordinario. 

       Con respecto a la "desmaterialización", es decir: morirnos y qué pasa en la otra "fase", pues mi recuerdo es que..., ¡somos muy livianos! ¡no pesamos casi nada..., aunque pesamos! se ven muy bien los procesos psicológicos y la casuística de cada cual y sobre todo cómo resolver -al menos esta es mi experiencia-, pero no existe -desgraciadamente-, una valoración realista de lo que es estar en el planeta..., ¡¡así nos llevamos las sorpresas que nos llevamos, una vez que "materializamos"!! Por ej., elegimos una madre, pero no contamos con quien es el Padre, o los hermanos y demás familiares..., (ésta es una, pero hay muchas más así...), otro ej., elegimos un jefe concreto, pero no contamos con el trabajo que tenemos que desarrollar... En fin, que suelen quedarse muchos cabos sueltos, a menos que seas una persona muy instruida y estés muy preparado..., ¡¡y aún!!. Bueno, esto es hasta donde yo he llegado, que es bastante poco... Es muy interesante para investigar.

Comentario por Maria Ysabél el octubre 27, 2013 a las 12:23pm

         El nivel de conciencia que tu llamas SER DIOS y que contrapones a nuestra consciencia individual, ¿tendría algo que ver con la consciencia colectiva? ¿Te refieres al par individuo-colectividad? ¿Dios como SER COLECTIVO TOTAL? 

       Sólo un apunte más para el asunto "emociones-sentimientos", -una de nuestras grandes tareas pendientes, pues somos bastante iggggggnorantes la gran mayoría, en esta cuestión-. Es en ésta época, cuando hemos empezado a entreveer que somos un "todo" y que un adulto maduro, pasa por tener mente-emociones-cuerpo-espíritu, equilibrados, en una "totalidad". No así, -algo muy común-, ver un adulto serio, absolutamente responsable en su trabajo, metódico, disciplinado, confiable, incluso sinceramente preocupado por los demás, pero un infantiloide emocional, que no llega más allá de papá y mamá... (sólo es un ej., hay muchas versiones de esta situación...). 

       La sabiduría que contiene el área emociones-sentimientos, está aún "en mantillas", empezando a investigarse y con algunos experimentos por delante: 

http://astrologosdelmundo.ning.com/profiles/blogs/adn-emociones-men... y

http://astrologosdelmundo.ning.com/profiles/blogs/el-cerebro-del-co...

estos son un par de trabajos, que indagan en "la sabiduría del corazón". 

       Muy lúcido tu razonamiento: "no es lo mismo sentir..., que padecer". El punto de consciencia es el que marca la distancia emocional necesaria para que se quede en sentir y no nos estorbemos con el padecer, que pienso-siento, que es justamente el matíz que Rafael le quería dar a la cuestión, no que dejáramos de sentir, si no que dejáramos de utilizar las emociones y sentimientos para estorbarnos. ...

       ¡Gracias por tu aportación y comprometido compartir! ¡Saludos! 

Comentario por Eunice Rondón el octubre 27, 2013 a las 1:46am

Hola Gabrielle ... 

Desde  mi vivencia personal ... el Amor no es divisible , ni el Espíritu tampoco, ésa chispa, energía divina , que en Cuerpo y Alma ... ¨Pensamiento y Emoción , Sentimiento , integrados  ... representa nuestra Natural Alegría de Vivir ... Compartimos estilos , formas , talento , dones, nos complementamos ...

Un Cordial Saludo

Comentario por Gabrielle Karawek el octubre 27, 2013 a las 12:24am

... por cierto, y con todo respeto (insisto, pues muchos deciden ofenderse gratuitamente cuando se les planta un punto de vista distinto), difiero totalmente con la parte del argumento donde el sr. Antonio Garau afirma "... el mejor rezo es la contemplación , sin emociones, de la obra del Universo infinito. Que somos UNO indivisible con el Universo, e inmortales y eternos como EL". Le pregunto; ¿cómo podemos tener esa consciencia divina, del todo, de respeto incluso, si ya empezamos a negar lo que sentimos? Una cosa es sentir, otra padecer el sentimiento como consecuencia de no ser consciente del mismo; no hay que confundir.

Saludos.

Comentario por Gabrielle Karawek el octubre 27, 2013 a las 12:19am

Pregunto a quien realmente comprenda la verdad revelada en el vídeo; si todos somos Dios, ¿dónde quedo yo como consciencia individual? Me explico, todos somos partes de este mundo (vivimos en él, esencialmente, compartimos las mismas características incluso con otros seres vivos). No obstante, ¿dónde queda mi ser individual que, siendo parte de todo lo que es, se diferencia de cada cosa que es conmigo? ¿Acaso cuando hablo con Dios, me hablo a mí mismo? Cuando nos desmaterialicemos de este mundo ("morimos"), dejaremos de ser nosotros para pasar a SER Dios o conservaríamos nuestra consciencia individual (elevada, divina, consciente, valga la redundancia, pero individual a fin de cuentas)?

Saludos.

P.D.: con todo respeto, pero si me van a salir con las leyes de La Biblia o algún manuscrito religioso o moral, ni se molesten en responder. Mi pregunta es genuina, quiero respuestas de la misma naturaleza.

Comentario por Maria Ysabél el octubre 24, 2013 a las 5:03am

       Como comentaba antes Antonio, en los tiempos de tribulaciones, pestes, grandes hambrunas y desastres sin fin, por los que han tenido que atravesar nuestros ancestros, el único sitio que había para mirar y reposar dulcemente era Dios-Jehová-Al-lah- y cualquier otro sinónimo que contenga el significado de "a resguardo del mal" y las frases de acogida, apertura, confianza, seguridad, esperanza y llene Vd., toda la página de lo que nuestra alma necesita cuando pasamos por nuestras "noches oscuras", están recogidas en en este párrafo de los Proverbios "Confía en Jehová con todo tu corazón y no te apoyes en tu propio entendimiento"..., porque en esos momentos el entendimiento, el intelecto, la razón, no existe, sólo hay caos, locura y enfermedad por doquier y de ahí no se sale más que con la fe que mueve las montañas. (Y esto sólo lo sabemos, los que hemos pasado por ahí, así que entiendo que muchos no lo entiendan). 

       Este párrafo, para una persona que quiera torcerlo, se puede utilizar muy fácilmente para demostrar lo dictador que es Dios, cómo nos usurpa el poder y el gobierno de nuestras vidas y más aún, como prefiere mansos corderitos tiernos que piensen y usen su "entendimiento" lo menos posible..., ¡que ya está Dios para pensar!... ¡craso error! indicaría ciertamente, alguien, además de falto de escrúpulos, falto de un entendimiento verdadero de la transmisión de la sabiduría y por demás, alguien que ni se ha molestado en estudiar, ni profundizar en el ser humano, las formas en que nuestros antiguos encontraban remedio y alivio a sus períodos difíciles, ni tampoco aceptación del conocimiento –poco o mucho-, que nos han querido transmitir nuestros antecesores; obviamente va a estar pasado por su “rasero”, muchas veces  manipulado, torcido e interpretado hasta la saciedad, por miles de "traductores". 

       Ahí está la limpieza de nuestro corazón y lo bien que hayamos sabido disciplinar nuestro cerebro –sobre todo para que no nos estorbe-, y saber entresacar y diferenciar lo que es verdadero, de lo que es falso. 

Comentario por Maria Ysabél el octubre 24, 2013 a las 4:55am

       La "palabra", en el sentido "divino", y parafraseando a Rafael, no está hecha para todo el mundo. El nivel de entendimiento, la capacidad de profundizar en ella, el querer entender qué se nos está diciendo y explicando y sobre todo, la existencia de un compromiso inalienable, para con el ser humano, son requisitos indispensables, para extraer lo verdadero y quitar lo que está de más, o la parte "real" que está detrás de todo ello, pero para esto, hay que tener un interés "verdadero", en extraer lo que se nos está queriendo transmitir y un profundo conocimiento del ser humano y su manifestación en el Planeta, algo para lo que no servimos tod@s, para esto están, los “Maestros”.

        Desde quien yo soy, El Corán, La Torá, la Bibilia, El I'Ching, Las Upshanidas, filósofos, teosófos, algunos teólogos, psicólogos, psiquiatras, antropólogos, artistas y en fin..., multitud de seres que me han aportado su "visión" de Dios y de la vida, no me impiden pensar, ni sentirme cerca de Dios, aunque no practique una religión concreta, igual rezo el rosario, que canto mantras budistas, que me despacho con postraciones..., todo me va bien y todo lo hago con cariño y respeto. 

       El despertar en el que tod@s estamos inmersos ahora, contiene la necesidad de dejar de generar ironias, con lo que antes ha sido decisión y aceptación del grupo humano, que ha  elegido como realmente útil y provechoso en ese momento, para resolver, atender, o generar lo que hiciese falta y que ha conducido a nuestros grupos humanos ¡¡hasta aquí!! 

Comentario por Maria Ysabél el octubre 24, 2013 a las 4:52am

       La mayoría de tod@s nosotr@s -exceptuando "infiltrados" y demás colaterales...-, somos librepensadores y apreciamos la diferencia, la novedad, lo distinto y a veces..., hasta lo opuesto. Tenemos la apertura para acoger nuevos conceptos y vivirlos con emoción, intuición esperanzada y agradecimiento por el encuentro con el conocimiento, quiero decir, que nos gusta aprender, investigar, indagar, buscar, encontrar ... ¡¡somos astrólogos!!. Aprender a extraer lo bueno del pasado y dejar que lo que no sirve desaparezca dulcemente, debería ser una asignatura para no andar perdiendo el tiempo, con cabezonerías inútiles, o desmedros "pierdetiempos", que no nos favorecen a ningun@. 

       El momento en el que estamos ahora, un espacio mínimo en el tiempo,  de cambio, transformación, regeneración y nuevas perspectivas, que pasan ineludiblemente, por que nuestro nivel de entendimiento, acepte, simplemente, acepte y confíe … Muchas de las cosas que están ocurriendo a nuestro alrededor, no las vamos a poder “controlar”, ni “clasificar”, ni “explicar”, ni “razonar”…, porque ni tenemos sabiduría, ni conocimiento, ni preparación para entenderlas, así que, por muchas explicaciones que nos demos, muchos esquemas que nos pasemos un@s a otr@s y muchos números que le pongamos a todo…, en la que estamos metidos ahora, sólo nos queda “confiar en Dios”, hacer lo mejor que sepamos y que haya suerte.  Pongámonos en las cuevas de hace 20.000 años y miremos desde aquí…, ¡¡pobres!! Rayos que les hacen de dioses, y cosas que brillan en el cielo de diosas… ¡¡que ignorantes, verdad?!! Pues así andamos nosotr@s ahora mismo… Dentro de mil años, nos reiremos… ahora, hay lo que hay.

       Pues para todo esto me ha dado su párrafo de los Proverbios. ¡Gracias! ¡Saludos!. 

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