ASTROLOGÍA MÉDICA. EL EQUILIBRIO SALUDABLE. LAS CAUSAS NATURALES

[Adela Ferrer]

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El cuerpo humano debe ser considerado como una maravillosa unión de partes que... concurren todas juntas a sostener las funciones y la vida de esta admirable máquina.

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El principio sanador es la propia naturaleza del enfermo; el médico sólo ayuda a la naturaleza en ese esfuerzo curativo.

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En la concepción clásica de la medicina, la salud de cada persona, no sólo de su cuerpo, sino del Ser, se establece a partir del equilibrio de dos influencias fundamentales, las Causas Naturales y las No Naturales:

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Unos principios o CAUSAS NATURALES, que hoy llamaríamos “internas” o “inherentes” y que son:

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1- Los Elementos (Tierra, Aire, Agua y Fuego) o (seco-frío-húmedo-caliente) La medicina astrológica atenderá a la conocida naturaleza esencial de cada signo y planeta para comprobar cuáles están desequilibrados en el paciente (todo exceso o carencia en los elementos provocará un desequilibrio) y poder recomendar remedios y actitud higiénica acorde con la cualidad elemental más deficitaria en la carta.

Imaginemos un niño de pocos meses de edad (edad de la Luna), con un supuesto temperamento puro en el que sólo haya agua. Le convendrá incorporar tempranamente alimentos, ambiente y régimen de vida que sean más calientes y secos. El verano (estación caliente y seca) será la estación en la que se equilibrará y reforzará naturalmente su salud.

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2- Los Humores (Bilis negra, Sangre, Flema y Bilis amarilla). El médico atendía al equilibrio, al buen “cocimiento” a la buena “mixtura” de todos ellos, que es imprescindible para la buena salud, de forma que cuando detectaba un exceso de determinado humor, recomendaba la mejor manera de “rebajarlo”. Supongamos que el supuesto niño del que hemos hablado, pilla un catarro en invierno (estación fría y húmeda); los humores que predominarán serán los propios de la flema: “mocos”, la somnolencia, el pulso lento, falta de movimiento...

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3- Los Temperamentos (melancólico, sanguíneo, flemático y colérico). O tendencia constitucional básica -que ya vimos cómo se determinaba por el tema natal- y que inclina al individuo a padecer con mayor probabilidad ciertos desequilibrios o enfermedades típicos de su mezcla temperamental.

Y ahora imaginemos que el niño tuviera un imposible temperamento “puro” flemático: tendrá más tendencia a que sus enfermedades cursen acompañadas de: hipersecreciones, hipertrofia del tejido linfático, hipertensión arterial...

De forma que su doctor procurará emplear todas las medidas higiénicas PREVENTIVAS para minimizar la posibilidad de que sus enfermedades cursen y se compliquen con este tipo de “añadidos”. Si ya está acatarrado, colaborar a que el cuerpo evacúe el exceso de flemas fortaleciendo por medio de medicamentos, higiene y dieta de vida acorde con todo lo pertenciente a Marte y al Sol y restringiéndole todo aquello que pertenezca a la naturaleza de Venus y de la Luna.

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4- Los Miembros o Partes del Cuerpo. Atendía a la parte corporal en la que se manifesta la patología y a su correspondencia con los signos, planetas y Casas del tema natal del paciente, modificando el tratamiento según las facultades delos órganos afectados.

Imaginemos que el niño sólo tose y destila por la nariz; además de evacuar el exceso de flema habremos de considerar cómo están Venus y Marte (las fosas nasales) en su carta, así como Aries (la cara).

Si son los ojos los que le lloran y se llenan de legañas, tendremos en cuenta al Sol.

Pero si el niño tiene otitis que supura, además de evacuar el exceso de flema, consideraremos cómo está Saturno en su carta.

Pero si se le afecta la garganta, consideraremos a Venus y a Tauro.

Si lo afectado son los bronquios, a Mercurio

Si tiene una pulmonía, a Júpiter.

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5- Los Pneumas (espíritu sutilísimo o energía que alienta las fuerzas: vital -regida por el Sol-, natural –regida por Júpiter- y anímica –regida por Mercurio y la Luna) que se pueden estimular y confortar aumentando la dosis de todos aquellos medicamentos, alimentos, y modo de vida que sean de la misma naturaleza esencial de la del planeta regente de dicha fuerza.

Para el caso supuesto, sería conveniente reforzar la virtud vital con aliementos, medicamentos, minerales, vitaminas propias del Sol, como por ej. Romero, ciruelas pasas, vitamina D, fosfato magnésico...

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6- Las Facultades (las fuerzas que hacen funcionar los órganos), como por ejemplo, dentro de las fuerzas vitales, la facultad del latido cardíaco, con tónificantes de la naturaleza del Sol.

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7- Las Acciones o normal funcionamiento de las facultades.

Dentro de la facultad vital, la expulsiva que tiene el corazón sobre la sangre y que, regida por Marte, habría que confortar con medicamentos de su misma naturaleza)

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Continuará con las Causas No Naturales...