LA LATITUD ECLÍPTICA DE LOS PLANETAS. SU INTERPRETACIÓN ASTROLÓGICA

[Adela Ferrer]

En astrología utilizamos coordenadas eclípticas, puesto que la eclíptica (el camino del Sol) es el centro del cinturón zodiacal, es decir, el centro del lugar por donde discurre la órbita de los planetas de nuestro sistema solar.

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Los antiguos astrólogos tenían en cuenta en sus juicios si los planetas se hallaban en latitud N. o S. de la eclíptica.

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Morín de Villefranche, en el capítulo 10º del Libro XVIII de su Astrología Gallica afirma acerca de la fuerza de los planetas: "Respecto a la latitud. Pues, en general, cuanto más cercano a la eclíptica esté un planeta tanto más acrecienta su fuerza o supera en virtud a otro más lejano por lo que a la influencia se refiere, pues ciertamente la eclíptica, que es la vía del Sol, príncipe de los planetas, es también el círculo más eficaz de todo el primer movible.

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Para juicios de Astrología Mundial, Ben Ezra escribe que, al interpretar el tema de 0º Aries y una vez hallado al planeta “regente del año” y estudiado el signo en que esté, hay que emitir un dictámen distinto según el regente del año se halle a N. o a S. de la ecliptica, así por ejemplo, suponiendo que estuviese en Cáncer dice:

“Si el regente del año se encuentra en Cáncer y es septentrional, indica calor ardiente; si es meridional, humedad.”

Entrada del Sol en 0º Aries o punto vernal

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Veamos la carta de hoy, día 14-10-2010

En ella no apreciamos qué planetas están a N. o a S. de la eclíptica, hay que recurrir a tablas o a un programa astronómico para averiguarlo.

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Aspecto del cielo correspondiente a la carta anterior. La eclíptica está dibujada en rosa. El Sol (en amarillo). Mercurio (en anaranjado) en latitud algo a N. de la eclíptica. Saturno (en morado) a N. de la eclíptica. Venus (en verde) en latitud muy a S. de la eclíptica. Marte (en rojo) en latitud algo a S. de la eclíptica.

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Y ahora, a la misma carta, le añadimos el Ecuador celeste:

El punto donde se cruzan la eclíptica y el Ecuador es el 0º Libra.

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Aquí vemos la diferencia entre coordenadas eclípticas y ecuatoriales.

La eclíptica está dibujada en rosa y los meridianos eclípticos -que son los que nos sirven en Astrología para determinar en qué grado se hallan los planetas- están dibujados en morado. El ecuador celeste está dibujado en verde y los meridianos ecuatoriales, en verde mar.

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En esta imagen, el planeta representado por la señal roja estaría a 2º Sur de latitud eclíptica; mientras que el planeta representado por el punto verde estaría a 3º Norte de latitud eclíptica.

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En Astrología Horaria también se utilizan las latitudes eclípticas de los planetas, por ejemplo para la pregunta de dónde se halla el objeto perdido o el tesoro escondido, o para la de saber si hay que cavar mucho para encontrar agua, dicen (Ben Ragel) que si el planeta significador del objeto (o de que se encontrará agua) se halla a N. de la eclíptica, el objeto está “hacia arriba”; si el planeta significador se halla en la eclíptica, el objeto se encuentra en la superficie; mientras que si dicho planeta está a S., el objeto estará “por debajo”.

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En esta fotografía, en la que se representa el Oeste o Descendente, vemos claramente a la Luna en latitud eclíptica N., motivo por el cual se ocultará, entrará en la Casa VI, algo más tarde de que lo haga el grado de la eclíptica cuyo meridiano ocupa. Al contrario de lo que le ocurrirá a Marte, quien al ir algo desviado a S. de la eclíptica, se ocultará un poquito antes de que su grado esté en la cúspide del Descendente.

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En cuanto a la Astrología Natalicia, Ben Ragel en su capítulo sobre el Atacir o direcciones nos pone el ejemplo de que en una natividad se encontrase la Luna a 10º Tauro y a 4º S. de la eclíptica y dice que; “Cuando dirijamos hasta la Luna el grado del Ascendente o alguna de la Partes o el grado del Sol, creyéndonos que el cuerpo de la Luna está en el décimo grado eclíptico de Tauro, no acertaremos de esta manera con el cuerpo de la Luna, porque está retrasada con su órbita del camino de la eclíptica por el que movemos el atacir, con el resultado de que no será entonces cuando se produzca lo que esperábamos”.

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Se considera que cualquier planeta que se halla en la línea de la eclíptica influye más eficazmente que si está a N. o a S. de dicha línea por varias razones:

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* La eclíptica se llama así porque es justamente allí, y no en otro lugar, donde se producen los eclipses solilunares y ya sabemos que la relación Tierra-Sol-Luna es básica para el clima y la vida en la Tierra.

Allí -en la eclíptica- se producen también las llamadas “conjunciones corporales” de cualquier planeta con el Sol, es decir que, vistos desde la Tierra, el cuerpo de uno se sitúa por delante del otro, potenciando el efecto de la conjunción de tal planeta con el Sol y dando lugar a lo que, con gran acierto, Ernesto Cordero llama “grado memoria”; un punto “primordial” que, al ser transitado o aspectado por otros planetas, resonará muy particularmente.

Conjunción corporal o tránsito de Mercurio por delante del Sol -en el "corazón del Sol"- (naturalmente en la eclíptica).

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b) De forma que cuando los planetas se hallan en la eclíptica, los vemos transitando por su propio Nodo, sobre el camino de su estrella eje: el Sol, caminando por un “surco” sumamente sensible en el que, a lo largo de milenios, se han ido sucediendo muchas conjunciones corporales de todos los planetas con el Sol, por eso consideramos, como los antiguos y como Morín, que la eclíptica es una línea muy “delicada”.

c) Cuando los planetas están en la eclíptica, cerca de su propio Nodo, cumplen con otra particularidad: aparecen por el horizonte Este –están en el Ascendente- exactamente a la vez que aparece por el Ascendente el grado de la eclíptica que ocupan. Y lo mismo ocurre con su culminación –cuando están en la cúspide exacta del MC- y con su puesta –cuando están en la cúspide del Descendente, de la Casa VII-.

[Adela Ferrer]

Hola, Juan: Muchas gracias por tu importante aportación.

[Adela Ferrer]

Hola, Rubén: Me alegro que te haya gustado.

[RUBEN ENRIQUE]

MUY DIDACTICO,MAGNIFICO.

[Adela Ferrer]

Gracias Mercedes, abrazos para ti también.

[Adela Ferrer]

Hola, Alejandro Pablo:

Gracias por tu comentario, tengo la esperanza de que, además de la bondad de las imágenes, también consideres de cierta calidad el texto que ilustran. Je, je, je.

 

 

 

[alejandro pablo ponte souza]

muy buena las imagenes

 

[Adela Ferrer]

Hola, Natal: Muchas gracias por el comentario y la cita de Jean Baptiste Morín. Efectivamente, tal y comop dices, en su obra "Astrologia Gallica", aparece en numerosas ocasiones esta referencia a la iportancia de tener en cuenta latitud eclíptica de los planetas.
Incluso, como podemos leer en el capítulo 9 del Tomo XVI "Acerca de los rayos y los aspectos" de los planetas, insiste en que hay que contar la distancia del aspecto desde el lugar que ocupe VERDADERAMENTE cada uno de los planetas implicados, lo cual presenta no pocas dificultades; dice que los verdaderos aspectos de los planetas no se han de medir por la eclíptica, -aunque puedan ser reducidos a ésta por cálculo-.
De forma que niega una conjunción planetaria en la que los planetas ocupen el mismo grado y minuto eclípticos pero se hallen separados en latitud eclíptica más de lo que suman los orbes de ambos.
Por ejemplo, si uno de ellos tuviese un orbe de 8º y el otro de 5º, y ambos se hallasen en la perpendicular del mismo grado eclíptico, sólo diríamos que están en conjunción si entre ellos no distan más de 13º de latitud.
Cuestión que puede ser muy polémica.
Un abrazo

[Natal Belo]

Son muy instructivos tus articulos Adela, en el aspecto de la latitud de los planetas y su tratamiento, también Morín los indica en sus aforismos de los tránsitos:

"En todo tránsito se deben tener en cuenta, al valorar el estado celeste del planeta actuante, su latitud radical y la del momento del tránsito. "
Como también como has indicado con las técnicas del atazir ya que no acertaremos de esta manera el resultado cuando se produzca lo que esperábamos.

[Adela Ferrer]

Gracias a ti Benjamín. Sí, la verdad es que los comentarios que me hacéis son buenísimos, más que interesantes; empiezan siendo algo así como un buen acabado, como la guinda que adorna al pastel y al final se han convertido en el propio pastel.
Ya ves, si no fuera por ellos se me habrían quedado colgados algunos errores garrafales.
Gracias a todos los que tenéis el aguante de leerme y, especialmente, a los que tenéis la paciencia de señalarme los fallos.
Un abrazo

[Adela Ferrer]

Hola, Roberto: De nada. No estoy muy al corriente del contenido de los textos de astrología "modernos", yo sólo puedo decir que me considero astróloga desde que, gracias a mi pertenencia a la Escuela de Traductores de Sirventa, entré en contacto con los textos tradicionales y, con ello, me puse a trabajar codo a codo un equipo de grandes y eruditos astrólogos.
Un abrazo