FIGURAS DE LOS ASPECTOS. Vaso telescópico, disidencia y soledad.

[Tito Maciá]

El Vaso telescópico es una pequeña figura de cuatro planetas de gran potencia y dinamismo. Dentro del ángulo cerrado de una cuadratura, se unen dos sextiles y tres semisextiles. La cuadratura siempre tiene un significado de esfuerzo y de trabajo, los semisextiles nos expresan ventajas, tener las cosas al alcance de la mano y facilidades para apropiarse de cosas lugares o ideas y el sextil otorga movimiento y dinamismo a la figura.

Todos los planetas de la figura se unen formando una múltiple conjunción en el armónico 12, indicando que su máximo potencial contiene un patrón de comportamiento gregario, de grupo, de colectivo, anque a muchos les hace sentirse como encarcelados del mundo, de la vida, de la sociedad y le hace tender a vivir un poco en las sombras, a actuar sin dar del todo la cara, con una actitud del que siempre dispuesto o preparado para escaparse y huir.

Los armónicos 3 y nueve están sellados por sendas Cruces cósmicas indicando graves dificultades para integrarse y dificultad enorme o casi imposibilidad de sentir la felicidad en sentido interno y relajarse. Esta figura genera un modelo de conducta que dificulta los encuentros con los demás, obstruye la libertad creadora, obstaculiza la integración en el medio social y hace difícil el autogobierno.

En su aspecto positivo nos habla de un modelo de comportamiento que tenderá a esforzarse mucho para lograr una conformación intelectual importante o un buen desarrollo de la mente superior a través de largos trabajos o duros viajes.

La figura se transforma en Gran trígono en los armónico 4 y 8, por ello las mejores cualidades de esta figura se relacionan con la extraordinaria capacidad de trabajo que otorga el modelo. Siempre aparece en personas de una gran capacidad de trabajo, son individuos que pueden trabajar en dos o tres sitios y ocuparse de muchas cosas al mismo tiempo. También contiene un modelo capaz de soportar las situaciones más duras o los momentos más difíciles. Precisamente en esas situaciones complicadas es donde mejor brillan sus cualidades humanas y de trabajo.

Pero esta figura oculta igualmente a dos sextiles cósmicos sujetos por una cuadratura.
señalando un patrón de conducta que contiene una fijeza mental extremada en el desarrollo de lo simbólico y una dependencia de los demás para desarrollar sus ideas, que pueden sentirlas como “misión" o como percepción superior dentro del plano mental que les hace sentirse “elegidos” para recibir ideas superiores, divinas, mágicas o especiales, en las que pondrán esfuerzo para tratar de materializarlas, inculcándolas en los demás y creando las consecuentes alteraciones en el pensamiento de otras personas de su entorno.

Este patrón de conducta no sólo se manifiesta en el plano mental, sino que pone fuerza y hace que el individuo se implique en la realización de sus ideas, no importa si se trata de cuestiones ideales, mentales, filosóficas, políticas, religiosas, culturales o esotéricas.

Es tan potente la energía de la figura en el mundo mental de las personas que la poseen, que después de descubrir la inutilidad de su esfuerzo, acaban por sentirse como un bello e ineficaz ángel batiendo vanamente sus alas luminosas en el vacío. Esta sensación puede llegar a apartarles de su grupo social y convertirlos en personas marcadas por una profunda introversión, que en muchos casos se aproxima a lo que podemos denominar "pseudoautismo”, en los que viven un mundo de sueños y fantasías y les lleva al desapego de la realidad exterior acompañado de un predominio de la vida intima o interior.

En su aspecto más negativo, este patrón de conducta puede desarrollar una personalidad esquizoide que puede hacer inducir a la persona que la tiene, a experimentar reacciones o imprevisibles.

Este modelo de comportamiento incluye una necesaria dosis de soledad, de sentimiento de estar siempre solo, de hacer las cosas en solitario, incluso cuando realizan actividades en grupo, se separan y forman otro grupo menor que disiente o genera una corriente diferente, es la figura de los disidentes. Un caso exagerado es de Alexander Solzhenitsyn, el escritor y disidente ruso que estuvo privado de libertad y al final obtuvo el premio Nobel de la paz.

Alexander Solzhenitsyn

La figura desarrolla un tipo de conducta que busca un poco la soledad, incluso cuando están reunido con gente, se pueden encontrar igualmente solos. Se encuentran más a gusto entre los grupos pequeños, porque entre poca gente pueden abrirse y dialogar y, especialmente debatir y discutir, cosa de la que son incapaces cuando se encuentran entre mucha gente.

Como cabe esperar hay pocos personajes famosos que tengan esta figura y los pocos que la tienen dejan una nota un poco especial como es el caso de Roman Polanski el famoso director de cine que aún se encuentra preso en Suiza a causa de una relación sentimental ilegal del pasado.

En el caso de Polanski se observa la conjuciín de Venus con Júpiteer en la Casa XII para darle más intensidad a un asunto relacionado con el armónico XII, Un amor con un mujer demasiado joven, un pecado que es un delíto del que no se ha podido escapar, por eso esta figura tiene algo de fatal.

Los años en los que, en la revolución solar aparece esta figura, se suelen escenificar situaciones muy complicadas que requieren un esfuerzo enorme y que acaban por dejarnos en ese año en perido de soledad, abandodo o fuera de lugar.

[Alejandro.]

Requieren de un esfuerzo enorme. Me quedo con está impresión. Me resulta como una prueba a superar para engrandecer, y acercarse a reinos superiores. ¿somos acaso los electores de tales circunstancias, antes de que ocurran?.Pregunto.