Hola María Noel, tu nombre suena como si tu fueras la esposa de Papá Noel y le ayudaras a traer regalos en Navidad. Perdona, una idea loca que se ocurrió... ya, vamos a lo serio.

Desde el momento que tienes ascendente Leo y el Sol en Piscis, en casa 8 o en casa 7, no lo sé. Se entiende perfectamente que es difícil para ti ser ese Sol como tu quisieras, más difícil si tienes pareja. Porque el Sol estará proyectado, entiéndase atribuido o representado por la otra persona con la cual te vinculas.

Coincido contigo en que los demás no necesariamente nos ven como quisiéramos ser vistos y se pudiera agregar que nosotros no vemos a los demás necesariamente como ellos son. Hay cierta tendencia egocéntrica que nos hace ver las cosas desde nuestro centro, pero es un fantasía, sin embargo es una buena guía para poder vincularnos. También es un punto de partida para iniciar una relación, pero teneomos una terea y es conocernos cada vez mejor y eso incluye conocer cada vez más a los demás. El todo consiste en hacer de este proceso algo flexible, de saber avanzar y retroceder, de aprender a acertar y aprender a equivocarnos.

Cuando el regente de la casa 1 está en la casa 7 (o en la 8) o al contrario, cuando el regente de la casa 7 esta en la casa 1, el yo y el tu se confunden. Se dan las relaciones tipo espejo, aquellas en las cuales uno se ve en la cara del otro. Esas relaciones son por momentos muy buenas, pero tienden a destruirse al descubrir la proyección, uno se desilusiona, o simplemente sospecha que hay algo que no entiende pero no sabe que es. Es el efecto espejo.

Es muy, pero muy frecuente, que los astrólogos suframos de esta condición, por eso deseamos saber el signo de la gente para acudir a un recurso para discriminar. Yo puedo ser una pluma al viento y saber que lo soy o puedo ser una roca en medio de una tempestad y no saber que lo soy. No todos somos estables y no todos sabemos como somos.

Igual podemos hacer esta otra reflexión, yo puedo descuidar por completo mi identidad y poner mi interés en otras cosas o, yo puedo hacer de mi autoconcepto una lucha constante para afirmarlo porque solo no se sostiene.

Como verás verse a uno mismo es una propiedad que varía de uno a otro, la casa 1 nos describe esta actitud. Y como tu dices, a veces a uno le cuesta verse. Ahora que me gustaría que otros me vean de una u otra manera, eso no a todos les interesa. Algunos están convencidos de ser de tal manera que ni el mundo entero los convence de lo contrario.  Así es, hay de todo en casa 1.