El reto de elegir evolucionar implica volverme hacia mi interior y escuchar

[María José Pérez]

Escuchar la voz interior de mi corazón que vibra con la energía pura del amor alojada en el centro de este santuario, escuchar la sabiduría que recorre las células de mi mente guiada por nuestra esencia de Luz, la fuente de la que procedemos.

 

Todo ser humano está capacitado para poder desapegarse de los sentimientos de rabia y de ira que surgen en momentos de tensión. Nuestro corazón y nuestra inteligencia desean guiar la canalización adecuada de nuestros sentimientos, por muy intensos y apasionados que sean.

 

Hay situaciones en las que nos sentimos frustrados e impotentes ante las actitudes de las personas con quienes nos relacionamos, a veces personas muy allegadas. Cuando uno profundiza en estos sentimientos dolorosos, descubre que también suele aparecer cierto sentimiento de soledad.

 

No sólo nuestra educación, sino también nuestros propios valores y nuestra evolución, nos indican que hemos de dar una salida a esta energía de alto voltaje que invade nuestros músculos hasta hacerles ponerse rígidos, vertiendo en nuestra sangre hiel amarga.

 

En un nivel biológico y genérico, nuestra vida emocional es una manifestación del ser orgánico y de la actividad glandular. Venus, representando la armonía, está vinculada a la condición armónica o inarmónica de los órganos, glándulas y sistema del cuerpo, y esta condición o estado va a determinar la posibilidad de que Marte, como principio de acción, suelte o libere en el torrente sanguíneo las hormonas, y determine también los fluidos y las toxinas dentro y fuera del organismo. (1)

 

Esta energía de Marte siempre tiene en su polo opuesto a Venus, porque van siempre acompasados, según el principio de polaridad. Venus nos orienta hacia la belleza y el amor de manera que podamos compensar el exceso de energía marciana que se apodera de nosotros. Para cortar esta vivencia tan física podemos tomar la flor de Bach Walnut y auxiliarnos con Larch si nos sentimos impotentes. Si, por ejemplo, experimentaste un estallido de cólera expresivo, la flor Cherry Plum apaciguará tus ánimos. Y si acaso te cuesta expresar tu enfado y te contienes, sintiéndote víctima de los demás, Willow viene a liberar tu resentimiento callado. Todo esto lo podemos sellar con Estrella de Belén, sobre todo cuando sabemos que viene de atrás, de otros recuerdos, de otras vivencias que están ocupando la memoria de nuestras células.

 

Es tiempo para sanar lo que ocurrió hoy y nos afectó, lo que ocurrió ayer, lo que ocurrió hace un año, hace unos años, hace siglos.

El único esfuerzo que hemos de hacer es elegir, elegir la paz, la bondad, la armonía, el bienestar.

“Estar despierto es no dejarse afectar por nada ni por nadie. Y eso es ser libre.” Anthony de Mello.

 

El cuerpo está aquí para auxiliar a nuestro espíritu y saltar, mover los brazos, correr, dar vueltas alrededor de un gran árbol hacia la izquierda y hacia la derecha. Son gestos que indican a todo nuestro ser el deseo de libertad y de progreso como ser humano. Podemos utilizar también nuestra voz, emplear el canto de las vocales. Según la zona de nuestro cuerpo que notemos tensa debido a los problemas, podremos hacer mayor énfasis en la expresión de la vocal que corresponde a cada centro energético o chakra:

U: primer y segundo chakra.

O: tercer chakra.

A: cuarto chakra.

E: quinto chakra

I: sexto y séptimo chakra.

 

Al fin y al cabo, en el nivel del alma, en la expresión realmente individual es donde el hombre reconoce su yo íntimo en términos de los valores -Venus-que ha descubierto y escogido como propios y, por lo tanto, actúa en consonancia a los mismos como un individuo -Marte-. (2)

 

Múltiples vías para trabajar nuestra decisión de caminar por las sendas de la paz interior y del bienestar. Como siempre, podemos elegir con discernimiento y consciencia.

 

 

(Notas 1 y 2: referentes a la obra de Dane Rudhyar, “Un estudio astrológico de los complejos psicológicos”.)