EN LA CUMBRE, EL SOL ES LA CORONA

[Antônio Carlos Costa Lima Vieira]

Sucede durante la primavera en su camino hacia el solsticio y, más tarde, durante el verano, a su regreso a la línea ecuatorial, el cenit del sol se posa en un escenario tropical y alrededor de su brillante trono, se centran las nubes, el calor y la lluvia. Dos veces al año, y sólo en lugares intertropicales, el sol está encima de la cabeza, en el cenit, y puede ver y llegar al fondo de un abismo, un pozo y un agujero.

Este conocimiento permitió Eratóstenes, en Siena (hoy Asuán, Egipto, y bajo el trópico de cáncer) en el siglo II antes de Cristo, determinar el tamaño de la Tierra. Este conocimiento debe haber traído alegría a los indígenas de mesoamérica con la posibilidad de iluminación solar de la parte inferior de un cenote, en el interior de un templo. Y yo siempre aprecio la intuición de que este conocimiento será capaz de acceder a las verdades fundamentales del arte astrológico.

A veces aliviado por las lluvias que él causa, durante su estancia en el cenit bochornoso sobre los horizontes terrestres intertropicales, el sol ve, abajo, los machos buscando aparearse con sus hembras. Y he observado que los perros defecan ya sin poder alinear sus cuerpos, como de costumbre, a lo eje magnético de la Tierra que los dirige hacia la dirección sur/norte (Este párrafo fue añadido en 24 de mayo de 2015).

Desde principios de los años ochenta, mi corazón quiere un tesoro traído por la luz y, en el mapa que elijo, este tesoro tiene que estar en la cúpula iluminada del cielo. Sin angeles para evitar que alguien acceda a ella, lo que he logrado ya me hace feliz: la teoría de los "Momentos Orbitales Cardinales”.

En los años ochenta, yo sólo rezaba para que la luz descienda hacia abajo para lograr llegar a la oscuridad profunda. Obligaciones profesionales y mi estupidez a errar en la ignorancia del mundo no habían removido los obstáculos innecesarios. Luego, en 1995, los nodos planetarios me fueron demostrados, como la escalera con los ángeles, lo fueron demostradas a Jacob. Entonces, poco después, como el padre a su hijo pródigo, como el pastor a su oveja perdida, entendí el afelio y el perihelio. Y porque Polaris no es exactamente en el cenit polar, me di cuenta de que el meridiano que la hospeda nos enseña acerca de los cuerpos celestes que llegan allí a reinar,  temporalmente, con sus virtudes y vicios astrológicos.

No puedo decir si las verdades experimentadas en la "corona cenital" están confinadas a regiones tropicales, pero el fenómeno, sí, lo es. Si quiero hacer una investigación sobre eso, no he hecho todavía. Este año, las nubes formadas por el calor no impidieron la iluminación. Y ahora, hoy, 5 de noviembre de 2014, cuando el sol llega a coronar a Brasilia con su esplendor, al menos puedo apuntar esta dirección y tal vez algún tesoro para todos nosotros.

Aquí, en Sobradinho, Brasília, DF, Brasil, esta fotografía fue tomada el 6 de febrero de este año de 2014. También el 6 de noviembre, el sol llega a iluminar todas las grietas de la tierra y la parte inferior de cada agujero no bloqueado en el suelo de de la región.

 

Acerca de iluminación cenital solar y como una sugerencia para investigaciones astrológicas, a continuación, voy a relacionar el tiempo y el grado zodiacal donde algunas ciudades tropicales son anualmente "coronadas" por el sol.

Tengan en cuenta que estos grados zodiacales coinciden con los Momentos Orbitales Cardinales de varios cuerpos del sistema solar, especialmente con sus ejes transversales (perihelio/afelio). A continuación, fueron citados algunos grados orbitales de los planetas que ya conozco. Porque tienen sus afelios y sus perihelios en estos grados de "coronación" cenital, pueden jugar la parte de las joyas de la corona o de las moscas que se posan a venir a defecar las ofrendas a Satanás que comieron.

 

La tabla demostrativa e interpretativa de tiempo y ubicación zodiacal del sol cenital sobre las ciudades tropicales llegó a ser demasiado amplia y no voy a ser capaz de publicarla ahora.

Más tarde. Puedo tomar, pero espero poder publicarla.