LA CUADRATURA URANO-PLUTÓN. ASTROLOGÍA CABALÍSTICA

[Pedro Jiménez Sanmillán]

                 LA CUADRATURA URANO-PLUTÓN
                     ASTROLOGÍA CABALÍSTICA.

     Mucho se ha hablado ya sobre la principal configuración que domina en estos momentos los cielos, la cuadratura Urano-Plutón, y de los posibles efectos mas o menos dramáticos que puede dar lugar, en cuanto a catástrofes, conflictos y cambios, que ocurran o se estén gestando, a lo largo de este período. No voy a abundar, por tanto, en este asunto que ya ha sido ampliamente tratado por muchos compañeros y especialistas en astromundial. Pero si me gustaría, en cambio, hacer un pequeño aporte analizando la cuadratura desde un punto de vista espiritual.

     Si cada configuración astrológica es una oportunidad de aprendizaje, no hay duda de que las que se dan entre planetas pesados, que incluso duran varios años como ésta, suponen una especial oportunidad de avance. Habrá que ver si somos capaces de entender qué es lo que se nos está pidiendo a la humanidad como conjunto. Y éste es precisamente uno de los grandes problemas. Ante la crisis y la destrucción de lo que considerábamos seguro, las pérdidas, el caos que cada vez parece crecer más en todas partes... ¿qué es lo que tenemos que aprender...? Paciencia... resignación... ¿eso es todo...? qué exactamente. Para intentar responder a esta pregunta, nada mejor que transportar esta figura al Árbol de Cábala.

     La cuadratura entre Capricornio y Aries, se establece entre las séfiras Binah y Gueburah, por lo que “se expresa” a través del Sendero Nº 18. Es una cuadratura de fase creciente, por lo que recorre el Sendero en sentido descendente involutivo. Por otra parte, se da entre Plutón y Urano por lo que, por resonancia, se activan también Keter y Hochman que son sus regencias. Así pues, “se expresa” también a través del Sendero Nº 11, igualmente en sentido descendente involutivo.

SENDERO Nº18
Imagen de Sendero: El Carro. Arcana Nº 7
Nombre místico: La Inteligencia de la Casa de Influencia.
                            Señor del Triunfo de la Luz.
Letra hebrea : Cheth (cerca, valla)
Signo asociado: Cáncer

SENDERO Nº 11
Imagen de Sendero: El Loco. Arcana Nº 0
Nombre místico: La Inteligencia Centelleante e Ígnea.
                            Espíritu del Éter.
Letra hebrea: Aleph (buey)
Planeta asociado: Urano

     En la larga contienda que se desarrolla desde siempre entre las fuerzas de la Luz y de la Oscuridad, ambas han utilizado, como no podía ser de otra manera, las mismas armas, las mismas herramientas. Por eso los poderes del mundo, que casi siempre han estado al servicio de la Oscuridad, fuesen o no conscientes de ello, han intentado por todos los medios alejarnos del saber oculto o esotérico, preservándolo para ellos mismos. El conocimiento es poder. Y así, mientras históricamente han perseguido, desprestigiado, ridiculizado, masacrado... a los iniciados de toda índole, ellos han aprovechado con eficacia los saberes, que a los demás nos negaban, para conseguir “sus fines”. Que nunca han sido otros que el “desconectarnos” de la Consciencia Eterna.

     Vemos pues, que el mundo que nos rodea corresponde perfectamente a las Imágenes de Sendero expuestas, desde el punto de vista más negativo. Un mundo acelerado, estresado, incierto y caótico. Decisiones extrañas, leyes injustas, amenaza de guerra, justificar lo ilógico, lo imprevisible como norma. Los grandes medios de comunicación (al servicio de la Oscuridad, lo sepan o no) atizan constantemente nuestro miedo a que cualquier desastre nos alcance, ya sea económico, de salud... generando la sensación de total indefensión. Así logran mantenernos sumisos y, lo que para “ellos” (los que verdaderamente mandan) es más importante, alejarnos de nuestro centro, de nuestra verdadera esencia.

     Cáncer representa nuestro mundo más íntimo, nuestros orígenes. La asociación con El Carro se observa en el desmedido interés por arrebatarnos precisamente eso: nuestras peculiaridades. Sus esfuerzos por uniformizarnos a todos. Que comamos las mismas comidas, que veamos las mismas películas, que usemos las mismas ropas, que tengamos las mismas costumbres y los mismos modos de vida. Que reneguemos de nuestras raíces y culturas. Al tiempo que, paradojicamente, se potencian los absurdos nacionalismos más radicales, haciéndonos temer y odiar al pueblo vecino o a todo aquel que es diferente. Respecto a la asociación de Urano con El Loco es bastante obvia. Que vivamos en la contínua inseguridad, esperando lo imprevisible, lo irracional. Miedo.

     Pues bien, nuestra respuesta no puede ser, de ninguna manera, luchar contra esto. Tan sólo estaríamos potenciando sus fuerzas. El único camino posible es el de la comprensión de lo que sucede. Recordar “quiénes somos realmente” para evitar así su manipulación. Que nos sigan tratando como a un rebaño. Sólo así podemos desarmarlos.

     Si observamos la imagen de El Carro, (da igual su versión tradicional o la moderna), comprobamos enseguida que es un vehículo imposible. No puede moverse. Las ruedas son un simple ornamento para producir la ilusión de movimiento. El auriga está “pegado” a él, ya que la parte inferior de su cuerpo es el cubo de piedra que representa la materialización del Espíritu. No avanza, por tanto, hacia ningún sitio, sino que es el camino el que se desplaza hacia él. Él elige lo que quiere que venga a su encuentro y, por tanto, lo que elige vivir. No necesita riendas. Es sólo su voluntad la que controla a los animales de tiro, que representan la dualidad. De igual manera, el iniciado (nosotros) sabe que su vida es una mera ilusión. Que su esencia es el auriga que se materializa en un cuerpo (su vehículo) para vivir las experiencias que él, y sólo él, elija. Porque tiene capacidad de elección. Da igual las circunstancias que le rodeen, por dramáticas y terribles que puedan parecer, él puede elegir cómo le afectan, cómo las juzga, en qué creer y en qué no creer.

     La imagen de El Loco nos presenta un individuo de apariencia irresponsable. Alguien que camina alegre y despreocupadamente al borde de un precipicio, sin mirar siquiera dónde pone los pies. Pero el iniciado (nosotros) sabe que no corre ningún peligro. Su traje lleno de planetas y galaxias nos recuerda que el universo está en él. Que todo lo creado es él. Que puede permitirse ser un auténtico inconsciente, porque él es la Consciencia Infinita. Porque él es Dios. En realida, nada puede destruirle o afectarle. Él es El Loco y cada uno de nosotros también somos El Loco... y eso es lo que no quieren que recordemos.

     Éstas son las energías que están activas durante el tiempo que dure la cuadratura. Las “ventanas de oportunidad” que se nos presentan. Lo que debemos aprender o, mejor dicho, reaprender, puesto que es algo que en el fondo de nosotros ya todos sabíamos. Basta ya de “jugar” a que lo desconocemos.

     El signo de Cáncer, asociado a El Carro, representa efectivamente nuestra casa, nuestra familia, nuestra infancia, nuestros orígenes... Pero al estudiarlo desde un punto de vista espiritual hay que elevar una octava su vibración, y entender que es nuestra verdadera esencia, nuestro verdadero origen, nuestra verdadera familia espiritual. Y si a Urano, asociado a El Loco, le elevamos la vibración, aparece la Consciencia Creativa que no permite que nada se estanque, se pare. Es el continuo cambio, la continua evolución que hace posible la experimentación y la vida.

     La cuadratura Urano-Plutón nos brinda la oportunidad de observar a las fuerzas de la Oscuridad haciendo su trabajo que, pese a que nos cueste comprenderlo, también forma parte del plan de El Espíritu. Y a nosotros, la oportunidad de reencontrarnos de nuevo con la Consciencia Infinita, con nuestro verdadero Ser. Es un nuevo episodio de la guerra que libran desde el principio de los tiempos las Fuerzas de la Luz y de la Oscuridad. Y a cada uno de nosotros nos toca ahora elegir cuál es nuestro bando.

Mis mejores deseos para todos.

Pedro Jiménez Sanmillán

LAUS DEO

[Eunice Rondón]

La rebeldía de Urano, su propia defensa ideológica junto a lo bélico de  Marte en Conjunción,  es enfrentado por una Victoria que no se alcanza ... un movimiento afirmativo de ideas de líderes ...y como todo cae por su propio peso ... La Luz iluminará estas Casas  Finales y en Crisis ... como Final de un Proceso. Después de mucha manipulación de las Ideas ... doble Moral , con un Mercurio en conjunción con Neptuno en Casa Kármica. 

[Pedro Jiménez Sanmillán]

Gracias a todos por tomaros la molestia de dejar vuestro comentario. Es un placer comprobar que el asunto os ha interesado.

Para Santiago:

Tienes razón, compañero, en que los "poderes del mundo" no tienen en su mayoría paladar para apreciar los saberes ocultos. Pero "conscientes o no de ello" están al servicio de las fuerzas de la oscuridad, que SÍ TIENEN paladar, y vaya si lo tienen. Y cuando hablo de fuerzas de la oscuridad, no sólo me estoy refiriendo a entes abstractos o de otra dimensión, sino a personajes reales que viven entre nosotros, pero que no conocemos porque nunca salen en la tele. Ellos son los que verdaderamente manejan el mundo sin que la inmensa mayoría de la humanidad sea consciente de ello. Supongo que esto me coloca entre los "conspiranoicos", pero qué le vamos a hacer.

En cualquier caso, es una cuestión de matices, y en lo fundamental estamos de acuerdo.

Un fraternal saludo para ti, y para todos los que habeis dejado comentario.

Pedro

[Santiago Bakach]

Don Antonio

Con mis respetos.

Plutón en la constelación de Sagitario trae consigo la destrucción de lo viejo y deteriorado, aquello que ya no es útil, pues Plutón también tiene una polaridad positiva, de allí que impulsa la renovación, y en el plano espiritual, manifiesta, o si se quiere, exige la depuración de los valores espirituales, la limpieza de ellos, cambios sutiles pero definitivos en los planos de la renovación espiritual. El Universo, "vasija espiritual" es en su esencia inmaculado, nada puede contaminarlo. Plutón en Sagitario exige que esa esencia se despoje de todo tipo de adorno y máscara, las mismas que se han sido colocadas por las iglesias, los religiosos, los místicos, los políticos y cuanto personaje ha gustado de entramparse y entrampar a otros con creencias e ilusiones ajenas a la verdadera esencia de lo espiritual.

Saludos cordiales.

[Santiago Bakach]

Una exposición interesante y poco frecuente en estas páginas señor Jiménez, aunque no comparto  la visión de que los poderes del mundo al servicio de la oscuridad procuran por todos los medios de alejarnos de los saberes ocultos para preservarlos para ellos mismos. En primera instancia, los señores de la oscuridad no tienen paladar para saborear los saberes "ocultos" saberes de Luz, son en esencia seres temerosos de si mismos, y por ese motivo, básicamente la verdadera pelea es entre fuerzas afines y no entre poderes distintos, aunque siempre se piensa y se difunde que es una pelea entre el bien y el mal. El problema central es en esencia la ignorancia de lo que encierra los verdaderos saberes, de allí que existe esa tendencia de alejar a los seres humanos del verdadero conocimiento, por temor a perder el poder, y ese conocimiento del que se esfuerzan en alejarnos, a través de los siglos, es un conocimiento indescifrable para ellos.

Como usted mismo lo expresa, la respuesta no es luchar contra esto, en estos tiempos considero que la respuesta es desentrañar el saber oculto de tal manera que sea comestible para el ser humano. Trabajo arduo y complejo, trabajo que ya se lo ha estado desentrañando, poco a poco y de manera progresiva, pero requiere madurar para que su fruto pueda ser disfrutado a cabalidad.

Saludos cordiales.