Reflexión sobre el sufrir

[Devarshi Narada Das Adhikari]

Entre el 2009 y el 2010, pase mas de 9 meses enfermo. Atravesaba el periodo Ketu-Saturno. Fue una época bastante difícil pues no solo estaba mal de salud, tampoco tenia una fuente de ingresos o algun trabajo. Lo hubiera podido tolerar, pero lo que hacia más grave todo esto era que mi hijo vivia conmigo y aun tenia 5 años. Por su puesto que de todo esto no se lo comente a nadie. Aunque una vez al mes llamaba por teléfono a mi madre que estaba en Buenos Aires, decidí no comentarle sobre mi situación.

Hoy estoy en el día tres de una gripe la cual se agrava con el clima lluvioso y húmedo de estas semanas. Cuando estuve en Cusco, me pude mantener consumiendo limones y agua caliente. Si cogía la gripe, dar las clases y consultas hubiera sido bastante complicado. Pues una cosa es enfermar en tu casa y otra es fuera. Entonces experimentando esta miseria del cuerpo, recuerdo las épocas como aquella del 2009, o en mi infancia cuando sufria de asma, bronquitis, varicela, etc. Con el paso de los años las enfermedades han sido mejor asimiladas, sobre todo los accidentes. Me han dejado grandes lecciones que de otra manera no hubiera comprendido.

En ese sentido, los problemas -y en esto incluyo a las enfermedades- son una bendición. No se trata de tomarlas a la ligera y decir te a ti mismo: “no estoy enfermo, no soy este cuerpo,..” Si asi fuera, porque entonces cuando todo esta bien, pensamos de manera distinta. Suele pasar que cuando todo es bonito uno manifiesta un espíritu falso y egoísta de disfrutar. Y que solo cuando enferma o tiene problemas, debe rendirse a Dios. Pero debido a que esa es la experiencia practica, es cuando sufrimos, cuando más nos damos cuenta que nuestros esfuerzos son inutiles sin la sanción del Señor.

Ayer, una amiga me hizo una pregunta relativa a este punto: “Por que tenemos que experimentar todas estas pruebas difíciles?. Para rendirnos más a Krishna. Solo cuando uno acepta que ha perdido, solo cuando aceptamos los minúsculos que somos y aceptamos la supremacía del sufrimiento, entonces todo se hace liviano. Es justamente ese sufrimiento la manera en que Krishna nos esta diciendo: “Por favor, entiende, este lugar no es tu hogar, esta no es tu naturaleza, solo entregate”. Cuando esta entrega ocurre en nuestra mente, luego en nuestro corazon, entonces ya no hay sufrimiento, este simplemente toma otra forma. Por eso en las escrituras se explica que quien no desea ver a Dios como Krishna, o quien no quiere aceptarlo, entonces vera a Dios como la muerte.

Krishna nacio un dia 8, el octavo dia de luna menguante, por eso se llama a ese día Janma=nacimiento, astami= ocho. Krishna ademas fue el octavo hijo de Devaki. El Señor Chaitanya solo dejos ocho instrucciones, el Sikshastaka. La casa 8 de la carta astral y el signo numero 8 están vinculados con el sufrimiento y el dolor. Y Saturno es su Karaka o significador.

En el Bhagavad Gita (que es octosilabo), Krishna dice, que si uno comprende la naturaleza trascendental de su Janma (nacimiento) y karma(actividades), no vuelve a nacer aqui, sino que alcanza su morada eterna. Pues bien, parte de esa comprensión sobra el nacimiento de Krishna, es comprender la razón por la cual nació un día octavo y no un dia 3 o 12, o 7.

Srila Prabhupada solia responder cuando alguien preguntaba, si esto o aquello es la causa de las enfermedades, y el respondia: “este mundo es una enfermedad”, “el cuerpo es la enfermedad”. Como acharya , el era directo, franco, veraz. No andaba con rodeos dándonos falsas esperanzas para acomodarnos aquí. Hagamos lo que tengamos que hacer, y no volvamos aquí. Pero al mismo tiempo debemos darnos cuenta de no desarrollar aversión a este cuerpo o a este mundo, pues tal aversión es el la otra cara del apego. Apego o rechazo son lo mismo, ego falso. Asi, cuando los problemas y sufrimientos llegan(Saturno, casa 8, el numero 8, etc) son una manifestación de Krishna.

Yo Soy la muerte que todo lo devora..., de los subyugadores, Yo soy el tiempo...; En varias partes Krishna dice esto, igualmente Srila Prabhupada explica que todo proviene del Señor. Un nombre de Krishna es Sarva graha rupam, que Él es la forma del destino de cada uno. Con estas declaraciones varios entonces dirán, que Dios es entonces el responsable de nuestro sufrimiento, y realmente eso no es así. Por nuestro deseo de estar separados de Él, al darle la espalda, automáticamente sufrimos y adoptamos un cuerpo en este existencia material. Por eso sufrimos, por el mal uso que le dimos a nuestro libre albedrío. Cuando le damos la cara y nos unimos a Krishna, inmediatamente, incluso los sufrimientos se vuelven bienvenidos, y por extraño que parezca, este cambio de percepción trasforma todo.

Aquel que me ve en todas partes y que ve todo en Mi, él nunca me pierde a Mi y Yo nunca lo pierdo a él..., Krishna dice esto en el Bhagavad Gita. Uno de los síntomas de realizar esto es la gratitud. Incluso si somos agredidos o perdemos a nuestros seres queridos en este mundo, incluso ahi hay gratitud. La gratitud genuina es total. Cuando hay gratitud, no hay tensión, no hay conflicto. Uno fluye con la creación, porque sabe que detrás de todo esta Krishna. Quizás muchos ociosos usan este argumento para no trabajar o esforzarse. Pero todo esto no es una invitación a la ociosidad.

Es una invitación a la confianza. Cuando hay confianza, esta ausencia de dudas nos da realización para estar fijos en nuestro dharma eterno. Y si hay responsabilidades circunstanciales que hacer en este mundo, pues las llevamos a cabo, sea con nuestros hijos, con la sociedad, etc. Tendremos la inteligencia para hacerlo de manera efectiva sin ver afectado nuestros deberes espirituales. Y porque tendremos la inteligencia, pues porque Krishna lo dice en el Gita también, ademas al estar en yoga con el Supremo, nuestra inteligencia automáticamente fluirá con las circunstancias.

Problemas habrán, esa es la naturaleza de este mundo. La diferencia esta en nuestro estado de conciencia. Si somos conscientes de Krishna, el océano de problemas se vuelve como el agua en un minúsculo charco.